IMAGINARIOS, REPRESENTACIONES Y GESTIÓN AMBIENTAL SOBRE RIESGO, AMENAZAS Y DESASTRES...38
Una visión esquemática de la distribución de la vegetación en la re-
gión muestra en la península de la Guajira el desarrollo de una vegetación
de tipo desértico, de porte bajo y mediano, con densidad baja y espinosa
compuesta principalmente por cardones, tuna blanca, cuji, jobo y trompi-
llo. Esta vegetación se modica un tanto en su parte sur con la presencia
de ejemplares de bosque espinoso tropical y de jacure, buche, guamacho,
tuatúa, toco, guayacán, entre otros.
Al sur de la Guajira, bordeando el norte del lago en ambas márgenes,
hasta llegar al sur de La Concepción en la costa occidental y al sur de Ciu-
dad Ojeda en la costa oriental, se encuentran los remanentes del bosque
muy seco tropical formados por ejemplares de vera, curarine, roble, jabi-
llo, apamate, jobo, entre otros.
Entre la anterior formación y en las estribaciones de la sierra de Perijá y
Andes y costas oriental, sur y occidental del lago, se encuentran asociaciones
de bosque seco tropical muy alterado por incendios, extracción maderera,
áreas de cultivo y pastoreo. En estos bosques han desaparecido prácticamen-
te especies tales como cedro, caoba, gateado, apamate, caro, samán, mijao,
etc., que estaban asociadas a somán, copaiba, jobo, caro, ceiba, camoruco,
algarrobo y algunas otras. Esta formación es una de las que ocupan mayor
supercie en la región; su supercie se estima en 23 690 km2.
En el límite sudoeste de la región se presenta la formación de bosque
húmedo tropical, que abarca un área de unos 13 000 km2. Dicha forma-
ción se encuentra sobre terrenos ondulados, algunos de los cuales llegan
hasta los mil metros de altitud. El bosque primario compuesto por cedro
amargo, ceiba roja, mijao, guayabón, pardillo, gateado, etc., ha sido inten-
samente ocupado en actividades agrícolas, ganaderas y madereras, lo que
dio lugar a extensas supercies de pasturas entremezclándose con ejem-
plares forestales de segundo crecimiento, como jobo, araguaney, apamate,
balso, bucare, camoruco, entre otros
En las áreas cercanas comprendidas entre 500 y 1 500 metros de al-
titud, tanto en el área de Perijá, al oeste, como en la Costa Oriental del
Lago, se había desarrollado un bosque húmedo premontano que cubría
unos 1 800 km2, compuesto por mijao, jobo, apamate, araguaney y ca-
morúes. Este bosque primario ha sido en gran parte eliminado por los